215 socios/as de la Asociación Parkinson Bizkaia participan en esta investigación en la que colaboran los Servicios de Neurología y Otorrinolaringología del Hospital Universitario de Basurto
Muchas personas con párkinson desarrollan en el curso de su enfermedad dificultad a la hora de tragar alimentos, ya sean sólidos o líquidos. Porque esta dolencia neurológica que 8.000 vascos/as tienen diagnosticada suele afectar a una o más fases de la deglución. Al masticar o al coordinar los movimientos de la lengua para situar la comida en la posición correcta para deglutir.
En la Asociación Parkinson Bizkaia ASPARBI, que el año que viene cumple 30 años desde su fundación en 1994 en Bilbao, hemos detectado muchos casos así. Es lo que médicamente se denomina disfagia orofaríngea.
La padecen entre un 50 y un 80% de los afectados de párkinson. Su instauración es lenta y progresiva. El/La paciente suele tener escasa conciencia de su dificultad para tragar hasta en fases más avanzadas de la enfermedad y ni siquiera suele mencionarlo a su neurólogo/a en la consulta. Entre otras cosas porque es, probablemente, el síntoma más desconocido de esta dolencia neurológica.
Por ello es importante considerar la presencia de disfagia. Es un factor de riesgo mortal que puede prevenirse con una intervención logopédica exhaustiva. Conscientes de ello, la Asociación Parkinson Bizkaia ASPARBI, en colaboración con el Hospital Universitario de Basurto, ha impulsado el que hasta ahora es el proyecto de investigación sobre la disfagia y el párkinson con mayor número de pacientes analizados que se ha realizado hasta la fecha.
El que ha sido titulado ‘Estudio prospectivo de la historia natural y características de la disfagia en la enfermedad de Parkinson’ ha recibido el visto bueno favorable del Comité de Ética de la Investigación con Medicamentos de Euskadi (CEIm-E).
En una primera fase que se prolongó durante seis meses, las enfermeras y los logopedas de ASPARBI testaron las dificultades para tragar de 215 socios/as de la Asociación.
La fisioterapeuta de ASPARBI consideró asimismo la postura que adoptan a la hora de comer. Es decir, la posición de la cabeza, los pies sobre el suelo, la espalda más o menos erguida. Se trataba de evaluar si modificarla podría ayudarles.
En una segunda fase que está ahora en marcha, la otorrino del Hospital de Basurto va a valorar el grado de dificultad al deglutir. Esto determinará el tratamiento que deben seguir estas personas.
Por último, ya en la consulta de Neurología de este centro hospitalario, se trabajará por incluir en la historia clínica de cada paciente el grado de disfagia orofaríngea que padece. La disfagia era un síntoma que hasta este momento no era contemplado con tanto rigor entre los/as afectados/as de la enfermedad de Parkinson.
Desde Asociación Parkinson Bizkaia-ASPARBI, participan en la investigación la presidenta y enfermera Begoña Díez Arrola; Naroa Zuza Turiño, también enfermera; Unai Pequeño Pequeño y Elva Gómez Sánchez, logopedas; y Andrea Martín Pérez, fisioterapeuta.
Desde el Hospital Universitario de Basurto toman parte el Servicio de Neurología, con Juan Carlos Garcia-Moncó y María del Mar Carmona Abellán. El servicio de Otorrinolaringología, con Javier Aitor Zabala López de Maturana y Arantza Ibargutxi Álvarez. Y Amaia Bilbao de la Unidad de Investigación en Bioestadística BIOSTIT.